Turismo de Gran Canaria destaca en La Palma el valor de la gastronomía como elemento de conservación del territorio y la diversificación turística
25 de septiembre, 2025El director gerente de Turismo de Gran Canaria, Pablo Llinares, subrayó en las Jornadas de Destinos Enogastronómicos el impulso que ha obtenido la gastronomía de la isla a través de la marca saborea Gran Canaria.
El panel reunió a representantes de Aragón, Baleares y Valladolid en un debate sobre los beneficios del enfoque Slow Taste para los destinos turísticos.
El director gerente de Turismo de Gran Canaria, Pablo Llinares, participó este jueves en la III Jornadas de Destinos Enogastronómicos Slow Taste, un foro organizado por Saborea España con el apoyo de la Secretaría de Estado de Turismo, que reúne en la isla de La Palma a representantes institucionales, expertos y profesionales del sector gastronómico y turístico. El encuentro, que se celebra entre hoy y mañana, 26 de septiembre, en el Museo Arqueológico Benahorita de Los Llanos de Aridane, y se centra en el concepto Slow Taste, vinculado a la sostenibilidad y la identidad.
Llinares intervino en el panel Beneficios para los destinos del enfoque Slow Taste junto a Mª Jesús Gimeno, directora gerente de Turismo de Aragón, y Joan Llabrés, director general de Qualitat Agroalimentària i Producte Local de las Illes Balears. Un bloque que moderó Juan Manuel Guimeráns, gerente de Turismo de Valladolid.
En su intervención, Llinares defendió la gastronomía como un recurso turístico que va mucho más allá de la experiencia culinaria, al estar directamente vinculada a la gestión del territorio y a la conservación del paisaje. En este sentido afirmó que “la gastronomía no es solo una experiencia para el visitante, es también una herramienta de gestión del territorio. Cuando protegemos el producto local y apoyamos a quienes lo elaboran, estamos conservando paisaje agrícola, fomentando el relevo generacional y manteniendo viva la identidad de nuestros pueblos. Eso se traduce en un destino más atractivo, más diverso y más resiliente.”
Asimismo, también resaltó la importancia de la integración de Gran Canaria en la red nacional de Saborea España, una adhesión que se materializó en el año 2017, que ha permitido dar visibilidad a la gastronomía de la isla y mostrar al mundo su singular propuesta basada en el producto local. En esta línea afirmó que “ir de la mano de Saborea España nos permite ganar presencia, y a la vez posicionar a Gran Canaria con una propuesta única, en la que se combinan una temporada de doce meses, una climatología benigna y una despensa atlántica que une mar y cumbre. Con Saborea Gran Canaria articulamos formación, promoción y comercialización para que la cocina del territorio llegue a la mesa del visitante sin perder autenticidad”.
Asimismo, Llinares señaló la gastronomía como un motor para la diversificación turística, capaz de generar nuevos motivos de viaje y oportunidades de negocio en todo el territorio insular. Según resaltó, “diversificar no es sumar actividades sueltas, es construir relatos completos. En gastronomía ese relato empieza en la finca, continúa en el mercado y culmina en el restaurante o en la bodega. Eso crea motivos de viaje fuera de los picos de demanda, distribuye flujos por toda la isla y genera oportunidades para pymes y emprendedores”.
A través de la participación de Turismo de Gran Canaria en estas III Jornadas de Destinos Enogastronómicos Slow Taste, la entidad responde al objetivo de reforzar la colaboración público-privada y de aprender de experiencias compartidas entre diferentes destinos españoles que trabajan en la integración de la gastronomía en su estrategia turística.
Turismo de Gran Canaria ha situado la gastronomía como un eje estratégico dentro de su plan de diversificación de la oferta turística, junto a la promoción del turismo activo, cultural y de naturaleza. Bajo la marca Saborea Gran Canaria se llevan a cabo a lo largo de todo el año acciones de promoción, formación y comunicación que ponen en valor el producto local y a los productores, proyectando la imagen de la isla como un destino moderno, diverso y comprometido con su identidad.