El Gran Descanso se descubrió hace ya decenas y decenas de años. Nació en pleno siglo XIX, cuando los viajeros ingleses que hacían la ruta de los barcos de vapor a Ciudad del Cabo descubrieron casi por casualidad la isla con los mejores inviernos de Europa.
Una isla que les ofrecía un refugio con microclimas perfectos para instalarse durante largas temporadas y descansar, sanar de dolencias, mitigar los achaques o simplemente, dejar que todo caminase despacio. Un lugar en medio de un océano de buen tiempo, donde relajarse, cuidarse y estar bien.
Fue en la segunda mitad del siglo XIX cuando Gran Canaria comenzó a convertirse en un importante destino de salud. Viajeros de media Europa llegaron de mil ciudades distintas, buscando el buen clima que se repartía durante prácticamente los doce meses. Europeos llegados de todas partes tomaban baños de aguas medicinales en los antiguos y señoriales balnearios de Azuaje y los Berrazales. Era el siglo XIX.
Pero el Gran Descanso no dejó de adaptarse al paso de los años. El visionario italiano Eduardo Filiputti renovó la fórmula en el siglo XX, creando un centro de salud en el mar de dunas de Maspalomas. El Spa sobre las dunas era un centro helioterápico, que permitía aprovechar los efectos beneficiosos de la combinación de arena y sol. Eran los años 60.
Hoy en día la fórmula del gran descanso sigue mejorándose en Gran Canaria. Porque la isla no deja de reinventar nuevas maneras de ofrecer las mejores vacaciones de salud al viajero. Un siglo y medio después, el visitante encuentra un abanico enorme de centros de Spa & Wellness, la atención de grandes especialistas en el campo de la salud y los últimos tratamientos en el campo de la belleza y el bienestar.
La experiencia de años como destino de salud, los métodos más avanzados y las más modernas instalaciones de spa y talasoterapia, se mezclan en Gran Canaria con un clima suave y un mar de playas. Todo ello apoyado por un gran número de profesionales en el área de la salud y la belleza, junto a una amplia oferta de atención sanitaria privada.
Si quiere dedicar unos días a estar bien y cuidarse, venga a Gran Canaria. Esperamos seguir siendo, por otros 150 años, el lugar donde se guarda la fórmula del Gran Descanso.