En el pintoresco Valle de Agaete, entre exuberantes paisajes y aromas embriagadores, se encuentra Casa Romántica. Este singular restaurante ha forjado una identidad única que se nutre de la historia y la belleza de Gran Canaria, y que ha sabido mantener su esencia de sostenibilidad y genuino amor por lo local a lo largo del tiempo.
Su historia está dividida en dos capítulos. El primero comenzó en 1976, cuando una suiza apasionada por la gastronomía y la sostenibilidad decidió abrir las puertas de su negocio, haciendo hincapié en la utilización de productos locales y de su propia finca.
El segundo capítulo, casi cinco décadas después, se escribe bajo la experta dirección de Víctor Lugo Jorge. Hoy, Casa Romántica no es solo un restaurante, sino un centro de interpretación de los productos de Gran Canaria y, especialmente, del Valle de Agaete.
Tesoros locales: el corazón de Casa Romántica
La elección de apostar por el producto local canario, en especial el de Agaete, es el corazón que impulsa el alma de Casa Romántica. El restaurante entiende que la autenticidad y singularidad de un destino radican en sus productos locales. Por eso, Casa Romántica es más que un restaurante. Es un centro de interpretación de los productos de la isla, un museo en el que se recorren 21 municipios de la isla a través de sus productos más destacados.
Con este fin, se ha creado una propuesta culinaria que combina la cocina tradicional y vanguardista, utilizando técnicas innovadoras para realzar los productos locales de Gran Canaria en propuestas como las croquetas de conejo en salmorejo con mojo de almendra ahumada o en el tataki de atún con emulsión de cítricos y tunos indios. Así, cada plato se convierte en una ventana que muestra la diversidad y riqueza de los sabores característicos de la región.
En su propuesta, las opciones vegetarianas y veganas también tienen cabida. La creciente conciencia sobre el impacto ambiental y la importancia de una alimentación saludable han llevado a que cada vez más personas busquen opciones alternativas en sus experiencias gastronómicas. Por ello, también se ofrece un menú especialmente diseñado para satisfacer a los comensales vegetarianos y veganos, manteniendo altos estándares de calidad y sabor.
Para Casa Romántica, esta filosofía es parte del futuro de la gastronomía, y está comprometido en seguir innovando y adaptándose a las preferencias y necesidades cambiantes de sus clientes. Solo así podrán ofrecer una experiencia gastronómica excepcional a todos los comensales, independientemente de sus preferencias alimenticias.
Una experiencia llena de detalles
Además de potenciar el producto local, el objetivo del equipo es resaltar todo lo que engloba la gastronomía de Gran Canaria en tres áreas fundamentales: la producción local en agricultura, ganadería y pesca; la transformación e industria culinaria que da vida a los productos, y el servicio y atención al cliente que brindan.
El restaurante busca ofrecer una experiencia integral y educativa a sus clientes para que no solo disfruten de la gastronomía, sino también para que conozcan su propuesta culinaria y se sumerjan en la experiencia que ofrece. Por ello, cuando presentan un queso, por ejemplo, cuentan la historia detrás del producto. Es así como entra en juego la narrativa y conexión emocional con cada plato.
Es crucial para Casa Romántica que la atención al cliente sea una experiencia completa y positiva, pues comprenden que «el 70 % de una experiencia satisfactoria radica en la atención recibida». Se entiende que cada visita a la isla de Gran Canaria también es una experiencia en sí misma, y el objetivo es hacer que la estancia del cliente sea tan memorable como el resto de su estancia en la isla.
Hacia la experiencia culinaria responsable
En su constante búsqueda por mejorar y equilibrar la sostenibilidad y la rentabilidad, el restaurante sigue implementando medidas que les permitan ofrecer una experiencia culinaria única y sostenible, a la vez que aseguran la viabilidad económica del negocio. Su objetivo es convertirse en un referente de excelencia gastronómica con el cumplimiento de cuatro pilares innegociables.
En primer lugar, la propuesta de Casa Romántica debe ser rentable para perdurar en el tiempo. En segundo lugar, es de vital importancia brindar a los comensales una experiencia única e inolvidable, pues, sin la satisfacción de los clientes, no podrán mantener el restaurante abierto.
El tercer pilar es el compromiso con los productos locales de Gran Canaria y un proyecto sostenible, aspectos que consideran de suma importancia y a los que prestan especial énfasis. Por último, para el equipo también es vital disfrutar de lo que hacen. Consideran que, si no disfrutan del proceso y la pasión por lo que hacen, no tiene sentido continuar con el proyecto, por más rentable que sea. Valorar la satisfacción y la felicidad personal es esencial para el éxito.
En esta línea, una de las acciones llevadas a cabo es la búsqueda de formas creativas de aprovechar todas las partes de los ingredientes utilizados. Por ejemplo, si se utiliza una parte del lomo de un producto para hacer un tataki, destinan la otra parte para elaborar un tartar, evitando el desperdicio innecesario.
En relación al agua, se han implementado medidas para su uso consciente y eficiente. Esto incluye la instalación de máquinas de filtrado para utilizar agua de manera más responsable.
El compromiso con la sostenibilidad va más allá de los ingredientes. El restaurante muestra su apoyo con la promoción de la cultura gastronómica de Gran Canaria y con compartir su conocimiento con la comunidad. Por ello, ha puesto en marcha un emocionante proyecto de aula de aprendizaje del producto de la isla, que incluye diversas jornadas y actividades en colaboración con diferentes ONG, agricultores, hoteles y otros actores del sector. La meta es enriquecer la zona y poner en valor los productos locales de Gran Canaria a través de sinergias y alianzas.
Asimismo, Casa Romántica busca aprovechar al máximo los productos de su propia finca, nutriéndose de la producción propia para ofrecer una experiencia gastronómica con ingredientes frescos y de calidad provenientes directamente de sus cultivos locales. También colaboran con la Cofradía de Pescadores de Agaete y diversas fincas del Valle de Agaete, en una apuesta por establecer acuerdos con proveedores locales y abastecer así las necesidades que no cubren internamente.
En un enfoque que busca no solo maximizar las ganancias, sino también cultivar un ambiente laboral equilibrado, el restaurante ha tomado una decisión estratégica: solo ofrece servicio de comidas y no brinda cenas. Al limitar sus operaciones al servicio de comidas, el restaurante contribuye a que sus empleados tengan una jornada laboral más equitativa y fomenta la creación de un entorno en el que los miembros del equipo puedan dedicar tiempo a sus familias, intereses personales y actividades recreativas. Esta política va más allá de cumplir con regulaciones laborales; representa un compromiso genuino con el bienestar de quienes contribuyen diariamente al funcionamiento del lugar.
Aunque se han realizado avances significativos en materia de sostenibilidad, el equipo es consciente de que aún hay mucho más por hacer. Reconocen que la mejora continua y la búsqueda de nuevas formas de reducir su huella ambiental son fundamentales para alcanzar sus objetivos sostenibles. Por ello, mantienen su compromiso de seguir implementando iniciativas que les permitan avanzar hacia una operación más responsable y respetuosa con el medio ambiente.
Un destino gastronómico reconocido
En un emocionante capítulo de su trayectoria, este año ha traído consigo un logro destacado para Casa Romántica: la Guía Michelin ha reconocido su esfuerzo y dedicación, incluyendo el restaurante en su lista de destinos culinarios de excelencia.
La reseña otorgada por el comité de expertos de Michelin no solo reconoce la calidad de la oferta culinaria. También destaca un aspecto distintivo del restaurante: la presencia de café y vino de producción propia. Este enfoque resalta la aspiración de ofrecer a los comensales una experiencia gastronómica que va más allá del paladar, sumergiéndolos en la riqueza de la cultura y la identidad local.
Esta distinción no ha desviado al equipo de sus valores fundamentales. En cambio, ha fortalecido aún más su compromiso con la sostenibilidad, la innovación y la pasión en su enfoque culinario. Conscientes de que la búsqueda de la excelencia es un viaje continuo, Casa Romántica se ha embarcado en esta nueva fase con una determinación renovada para deleitar a los comensales con experiencias que no solo satisfagan el paladar, sino también alimenten el alma.
Adentrarse en Casa Romántica es embarcarse en un viaje de sabores y sensaciones que despiertan todos los sentidos. Cada plato es una oda a la tradición culinaria de la isla, cuidadosamente entrelazada con toques vanguardistas y creativos. Cada bocado es una invitación a descubrir los sabores únicos que emergen de esta tierra que ofrece vinos exquisitos y quesos galardonados.
Con una pasión contagiosa por la sostenibilidad, este rincón del Valle de Agaete se erige como un faro de esperanza para una industria culinaria más consciente y respetuosa con el entorno. Cada rincón respira el compromiso con el medio ambiente y el deseo de crear una experiencia que trascienda lo gastronómico, convirtiéndose en un auténtico centro de interpretación de la riqueza culinaria y cultural de Gran Canaria.
*Más información: Restaurante Casa Romántica. Reinterpretación de la Cocina Canaria.
