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Blog Oficial de Turismo de Gran Canaria

Faro de Maspalomas

Tu palmera personal

La palmera canaria forma parte del paisaje y la identidad de Gran Canaria y del recuerdo que te quedará de tu estancia.

Siempre han estado aquí, peinando vientos, procurando sombra, recortando cielos azules con su esbelta silueta. Un grupo de ellas dio nombre a la capital de la isla, Las Palmas de Gran Canaria, hace ya más de cinco siglos. El poeta Bartolomé Cairasco de Figueroa (1583-1610) decía que por aquí eran “altísimas, mucho más que en Egipto las pirámides” y las crónicas de la Conquista referían que “la isla era un jardín, toda poblada de palmas”.


Cultivo de papas en la Finca de Osorio

La papa, de los Andes a Gran Canaria

La papa, una de las joyas de la gastronomía de Gran Canaria, tiene detrás una apasionante historia.

Te vamos a contar la historia de un viaje increíble que todavía no ha concluido. La protagonista de este relato no es muy grande, pero ha alcanzado fama mundial, ha recibido múltiples premios, inspirado poemas y canciones, alimentado a generaciones enteras y se ha convertido también en uno de los grandes símbolos de la gastronomía de Gran Canaria.


Laguna de Valleseco, en Gran Canaria

Gran Canaria, la isla de los 80.000 castañeros

Gran Canaria cosecha castañas hasta mediados de diciembre y es posible disfrutar de su sabor otoñal tras volver de la playa.

Posee la forma de un pequeño corazón. No es de extrañar por lo tanto que se la considere el mismísimo espíritu del otoño. Con un matiz muy especial en el caso de Gran Canaria. En otras latitudes, la castaña anuncia la llegada del frío, con relatos que hablan de familias recogidas alrededor del fuego mientras fuera el mundo se hiela y aúllan los lobos. Descuida. No hay lobos en Gran Canaria. Además, aquí podrás disfrutar de su sabor otoñal tras regresar de la playa y encontrarte con un puesto de venta donde manos diestras las asan en un brasero.