27/02/2017
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Cultura
El primer ganador de la gala Drag del Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria saca sus plataformas y sus recuerdos.
Cae la tarde sobre la bahía de Las Canteras, en Las Palmas de Gran Canaria. Cientos de personas se beben los últimos rayos del sol en la playa, igual que hacen algunos cangrejos en un lugar donde llegan pocas miradas, en una esquina de La Puntilla, allí donde el océano humedece las viejas lenguas de lava volcánica y las hace brillar como si fueran la piel que recubre a un negro y durmiente dragón milenario. Cerca descansan también las barcas marineras, a la vista de los comensales llegados de cualquier lugar del mundo para descubrir a qué sabe una papa arrugada o un taco de cherne.